Durante un proceso de campaña electoral, los integrantes del equipo de un candidato pueden llegar a dedicarle mucho tiempo a la elección de un slogan, el tipo de color del partido, la tipografía a utilizar en las distintas piezas, entre otros aspectos. Sin embargo, Cesar Martínez señaló que “lo esencial es saber qué es y qué representa el político para el elector”.
“Los seres humanos votamos por seres humanos, no necesariamente por logotipos o una frase; por aquel que puede lograr conectar, comunicar y convencer”, agregó el estratega.
Cabe destacar que el branding del candidato o candidata es la marca personal, que mediante el desarrollo de ese personaje público, los posibles electores se van a identificar a la hora de votar. “Conectar no significa ser simpático o el más platicador”, aseguró Martínez.
“El mundo eligió carismáticos hace unos años (Obama o Peña Nieto, ejemplificó) y ahora viene la época de los irreverentes; de aquellos que rompen el sistema. Tal vez, después de estas selecciones regresemos al político serio”.
En la misma línea, este objetivo busca saber conectar la mejor esencia del político con ese posible elector: “No se trata mucho de seriedad o simpatía, sino de que ese personaje mediático conecte con lo que busca la gente”.
La marca personal no nace, sino se hace
Bajo este concepto, el fundador de MAS Consulting Group remarcó la existencia de personajes que ya nacen carismáticos. Sin embargo, resulta clave entender que no todos poseen los mismos atributos.
“Es importante encontrar la esencia de la persona y no solo pensar en el emisor, si no en lo que está buscando el receptor: qué valores tiene el votante y que busca”, expresó. Para ejemplificar este concepto utilizó a la empresa cosmética Revlon que tienen el siguiente eslogan: “En la fabrica producimos cosméticos, pero en la tienda vendemos esperanzas”.
Por otro lado, hizo hincapié sobre los outsiders: “Los apolíticos son quienes están conectando con el electorado porque la gente está harta de la política. Aquellos candidatos que sepan conectar sin dejar de ser ellos van a lograr esa marca. El dueño de la marca es la gente”.
- ¿Tienen ventajas los outsiders sobre los políticos tradicionales?
- Tienen la ventaja de no tener que estar atados al estilo político y como desventaja que no tienen un poder de organización tan grande. Hay elementos como las redes sociales que hace que todo esté más parejo; aquellos que no podían ser considerados hoy tienen posibilidades. Cualquier gente puede ser su propia marca.
- ¿El objetivo de la marca personal es ser único y original?
- Si y tiene que ser algo que empate con algo que busca el electorado. Al final de cuentas, estamos hablando de elecciones. De procesos políticos. También están los candidatos que no identificamos, te caiga bien o mal, si no los identificas, no los recuerdas. Sufrimos en carne propia que nos gane la marca personal más poderosa del planeta: Donald Trump.
