Juan Pablo Pozo dialogó sobre el rol actual de las encuestas, en diversos procesos electorales, debido a las actitudes que está mostrando la ciudadanía a la hora de votar.
“Creo que hay una falta de rigurosidad científica en la muestra y, lastimosamente, una relación directa entre el candidato, o su grupo político o económico, y las encuestas”, afirmó Juan Pablo Pozo, en diálogo con Mensaje 360, a la hora de hablar sobre la poca credibilidad que están adquiriendo las encuestas hoy en día.
En la misma línea, expresó que, como consecuencia, las encuestas pasan a ser menos objetivas y no cumplen su principal tarea: marcar hojas de rutas. “Pasan a ser herramientas de campañas para tratar de distraer al electorado y no busca darle cuenta de lo que realmente está pasando con la intensión del votante”, agregó.
“Hoy no hay estrategias de campaña sin hacer análisis y estudios, pero dichos estudios deben tener ciertos parámetro o rigurosidad para que representen lo que en verdad está pasando en el país”.
A la hora de conversar sobre otras herramientas que puedan suplantar la tarea de las encuestas, contestó lo siguiente: “Hoy nos damos cuenta que los electorados son muy volátiles; están cambiando de preferencia de un día para el otro. Esto hace que las encuestas sean una fotografía del día, del momento. Es decir, los resultados que muestran no significan que sea lo que vaya a pasar el día de la elección”.
Para respaldar su argumento, utilizó como ejemplo las elecciones en Costa Rica: “Acabo de venir de las elecciones presidenciales de Costa Rica del pasado domingo. Un candidato, que estaba en el séptimo lugar tres semanas antes, se ubicó primero: pasó del 3 al 27 por ciento”.
“Hay que tener una lectura adecuada y los comunicadores, en ese sentido, hacen una labor muy importante. No hay ningún país que se escape de las incidencias de las encuestas”, finalizó.
Encuestas y pronósticos: su impacto en las elecciones
Durante su conferencia en la XII Cumbre Mundial de Comunicación Política,desarrolló el impacto de las encuestas y los pronósticos previos en los procesos electorales. Partió desde el siguiente planteo: posicionar ganadores de encuestas o ganadores que se convierten en autoridades.
Mencionó que eso “es parte del análisis comunicacional, incluso institucional, y de los ejes estratégicos de las campañas electorales”.
“Es un tema importante que nos da luz que en esta coyuntura política, tenemos que los datos distorsionan lo que es una encuesta o pronóstico a los resultados oficiales de un proceso electoral”, criticó.
