Por Mariano Berro: Coach Ontológico, especializado en entrenamiento de líderes y equipos. Consultor Político con experiencia en diferentes procesos latinoamericanos.
Como si fuera el clasificado de un diario: Se buscan líderes políticos humanizados. En la actualidad, la política es vista como una actividad fría, impersonal y alejada de las necesidades de la gente. En lugar de ser vista como una herramienta para el bienestar común, se percibe como una lucha por el poder, donde los líderes políticos están más preocupados por mantener su estatus y privilegios que por servir a la sociedad.
Esta desconexión entre la política y la ciudadanía ha generado una creciente desconfianza hacia los políticos y las instituciones que representan. En este contexto, es crucial que los líderes puedan tomar consciencia que la política no es solo una cuestión de poder, sino que también tiene una dimensión humana importante.
En una era donde las ideologías están dejando de votar, donde partidos políticos tradicionales han perdido fuerza alrededor del mundo, donde partidos nuevos llegan pero no pueden consolidarse, en contextos donde los outsiders tienen más aceptación que antes, algo hay que cambiar.
La reciente publicación de CumbreCP y la editorial InnoPolitica titula una clara realidad: “No grites, nadie te escucha.” Es que ya no se trata de gritar más fuerte en el medio de una mezcla de ruidos ensordecedores.
La humanización de la política significa que se debe ser capaz de conectar con la sociedad, y así, entender sus necesidades y preocupaciones. En lugar de actuar como seres distantes y, a veces, como seres superiores, deben ser capaces de empatizar y demostrar que están dispuestos a trabajar por el bienestar común.
Para lograr esto, los líderes políticos deben ser más transparentes y accesibles, y estar dispuestos a escuchar y responder a las preocupaciones reales del día a día ciudadano. Deben tener la capacidad de hablar con la gente en un lenguaje claro y directo, para comunicar de manera efectiva su visión para el futuro.
Además, los líderes deben ser capaces de trabajar en equipo y colaborar con otros líderes políticos y grupos de la sociedad civil para alcanzar objetivos comunes. En lugar de enfocarse en la competencia y la lucha por el poder, deben estar dispuestos a trabajar juntos para abordar los desafíos comunes que enfrenta la sociedad.
ENTONCES, ¿DE QUÉ SE TRATA HUMANIZAR LA POLÍTICA?
Se trata de reconectar con la gente y restaurar la confianza en las instituciones. Si los políticos son capaces de ser más humanos y demostrar que están dispuestos a trabajar por el bienestar de la sociedad, pueden ayudar a construir una sociedad más justa y equitativa para todos. Además, también estarán colaborando con algo fundamental en nuestros tiempos, recuperar la confianza en la política para el fortalecimiento de nuestras democracias.
¿CÓMO LOGRAMOS ESTO?
Los liderazgos se construyen, se fortalecen, se entrenan y se deben adaptar a las distintas necesidades de las diferentes épocas.
Para lograr una política más humanizada, los líderes políticos deben desarrollar ciertas herramientas y habilidades para poder lograr recuperar credibilidad, confianza y generar esperanza en la sociedad.
- Empatía: Comprender y sentir las diferentes situaciones, distintas realidades, sus necesidades y preocupaciones. La empatía les permite establecer una conexión más cercana con la gente y trabajar por soluciones más efectivas y justas.
- Comunicación efectiva: Capacidad de comunicar de manera clara, efectiva y accesible, utilizando un lenguaje que cualquiera pueda entender. Esto les permite explicar su visión, sus propuestas y planes de acción para mejorar la vida de la sociedad.
- Transparencia: Ser transparentes en sus acciones y decisiones, permitiendo el acceso a la información relevante y crucial para su bienestar. La transparencia ayuda a construir confianza y credibilidad en las instituciones políticas.
- Trabajo en equipo y colaboración: Ser capaces de trabajar en equipo y colaborar con otros líderes políticos, grupos de la sociedad civil y actores relevantes para lograr objetivos comunes. La colaboración y el trabajo en equipo permite abordar problemas complejos de manera efectiva.
- Inclusión y diversidad: Entender la diversidad de la sociedad y ser inclusivos en su visión y planificación. Trabajar para el bienestar de todos los ciudadanos, sin discriminación ni exclusiones.
- Pensamiento estratégico: Pensar a largo plazo y planificar estratégicamente para lograr objetivos concretos. Esto les permite diseñar políticas y planes que sean efectivos y sostenibles en el tiempo.
Líderes humanos para una era donde las incertidumbres son parte de nuestra realidad y en los más variados aspectos. Hechos recientes que pusieron en jaque nuestra forma de vivir y el futuro que vendrá principalmente por el desarrollo y avances de la tecnología en todos los ámbitos de nuestra vida.
Se necesitan liderazgos auténticos, confiables y empáticos. Es el tiempo de los políticos humanizados.
