Brasil enfrenta en octubre la elección más polarizada desde el retorno democrático en 1985, se especula que podría ser la primera en este siglo que se resuelva en primera vuelta debido a la grieta que divide a los brasileños . Lula da Silva quien tuvo su primera candidatura presidencial en 1989, nunca habría imaginado que en 2022 una charla por Instagram live iba a tener mayor poder de convocatoria que un acto en la mítica Avenida Paulista. Su rival, el actual presidente Bolsonaro ya lo corroboró en 2018 donde las redes sociales fueron su principal alianza para ganarle a todos los partidos tradicionales.
Lula tiene enfrente no sólo al presidente de Brasil sino que también a un poderío en redes sociales pocas veces visto, a cuatro meses de las elecciones presidenciales, Luiz Inácio da Silva, de 76 años, tiene ventaja en las encuestas de las principales consultoras del país como DataFolha o Ipespe, pero esto se da totalmente vuelta en las redes sociales , donde el histórico líder del PT está muy lejos de la popularidad del actual mandatario de Brasil , quien probablemente sea su contrincante en el balotaje del 30 de octubre.
Para tomar dimensión Bolsonaro suma 47 millones de seguidores en total de todas sus redes sociales, entre Facebook, YouTube, Twitter, Instagram, Telegram y TikTok, el triple de los que tiene Lula que son 14 millones , sólo para dimensionar en Instagram Bolsonaro tiene casi 20 millones de seguidores mientras que Lula tiene 5 millones. Lula afirmó hace pocos años que él no usa celular.
Cabe recordar que en 2018 Bolsonaro llegó al Planalto con una campaña, basada en linchamiento a sus rivales en las redes y de desinformación, que por ejemplo dejaron fuera de carrera al PSDB, histórico rival del PT , las fake news fueron uno de los motores de la llegada del exmilitar al poder , planteando como principal teoría un pacto de ingobernabilidad entre PT , MDB y PSDB los tres partidos más importantes del país en contra de Bolsonaro
Lula está bien posicionado en los medios tradicionales, relacionado también a que Bolsonaro está distanciado con todos los medios de comunicación de importancia nacional que sean escritos, televisivos o radiales y por ende no da entrevistas, salvo sus conferencias de prensa esporádicas o sus Facebook live , el presidente de Brasil se centra más en su campaña de redes por Facebook , Telegram y Twitter por la cual busca llegar al “ciudadano de centro” y no tanto a su base electoral , por eso responde una vez por semana por Facebook preguntas de ciudadanos.
El líder del PT ya planteó en varias ocasiones que en caso de volver al poder buscaría regular las redes sociales, aunque nunca explicó cómo lo haría , hasta ahora su partido sólo se enfoca en compartir distintas campañas que llaman a no crear ni reenviar fake news , mientras que Bolsonaro es investigado en la Corte Suprema por desinformación
El TSE , tribunal supremo electoral de Brasil está analizando medidas para evitar que la campaña, que oficialmente recién empieza en agosto, no se convierta en una nueva guerra de desinformación como fue hace cuatro años.
Habrá que esperar a las elecciones de octubre para comprobar cuál de los métodos de campaña es el que triunfa, uno totalmente moderno u otro más antiguo y tradicional que está buscando modernizarse.
