En días recientes, una joven candidata a la alcaldía de la tercera ciudad en importancia de Colombia, en un esfuerzo por tener mayor visibilidad y asesorada por una “coach de marca” logra el objetivo de visibilizarse, pero auto infringiéndose un daño reputacional difícil de reparar; con un supuesto “ataque de machismo” en su contra.
Según se entiende por lo de coach de marca es una técnica que permite identificar una marca, impulsan los valores de la marca, con objetivos claros, disipando obstáculos a través de coaching para el desarrollo de la marca, y a la vez permitiendo identificar la marcas con las audiencias y a como conectarse con ellas. Vaya definición, pero en ningún lugar, habla de que es una estratega o asesora política, una experta que domina varias áreas de las campañas, que tiene la capacidad de estudiar y entender el entorno donde se desarrollan, el momento histórico y las coyunturas presentes.
Volviendo a la novel candidata, podría pensarse que se puso en manos de un profesional absolutamente desconectado de la política, en especial de su proyecto electoral, y, terminaron haciendo una pieza de video donde aparece la candidata en el medio del tráfico, y de repente se detiene un vehículo y un joven la insulta, la agrede verbalmente, y le arroja agua a la cara.
Consecuencia de la agresión el video se hice viral, generando sensibilidad y solidaridad hacia la candidata, recibiendo innumerables mensajes de apoyo. Comprensible la reacción de la gente, teniendo en cuenta que no se vale la violencia en ninguna circunstancia, menos en la política y mucho menos contra una mujer.
La lucha de las mujeres por la equidad en todos los campos ha logrado avances muchas veces con grandes sacrificios; pero, aún hay mucho camino por recorrer para llegar a una equidad en todos los campos de la vida para las mujeres, y hoy por hoy, pese a los logros, hay demasiadas víctimas con todo tipo de violencia o discriminación.
Así que, esta “puesta en escena” muestra de manera clara varias situaciones sumamente preocupantes. La primera, la violencia contra las mujeres es un tema con el que no se juega, eso es revictimizar a millones de mujeres que han padecido la violencia, en especial cuando proviene de precisamente de una mujer. Lo segundo, la incongruencia entre lo serio que es el objetivo de la política, en especial, cuando se presume el compromiso que significa ser alcalde de cualquier conglomerado social.
En tercer lugar, el absoluto desprecio por la técnica y la experticia de gente que sí sabe de consultoría política es insultante. Cuando un líder hace política seria no pone su proyecto político en manos de alguien inexperto, desconectado de la realidad y desconocedor por completo de los principios básicos de la comunicación política moderna.
En cuarto termino, maltratar la democracia usurpando y usando la política para convertirla en una cosa trivial, banal, y mediocre solo para lograr exposición mediática, sin entender que si la exposición es negativa -como lo fue en este caso- será muy difícil revertir el daño causado en el imaginario social.
Como quinto aspecto relevante, y que claramente la -coach de marca- no logró dimensionar, es que, su clienta pretende competir en una ciudad que, según la última encuesta de Datexco, el alcalde tiene la mayor desaprobación del país, con un 77 % de rechazo; es decir, casi 8 de cada 10 ciudadanos reprueban la gestión del alcalde. Entonces, esta joven, resuelve jugar a la política haciendo esta “puesta en escena” en una ciudad en la que, evidentemente, los ciudadanos no están muy felices con los resultados de la política en su territorio.
La moraleja de esta triste historia la conforman varias conclusiones, a saber: Uno, la campaña electoral más cara, es la que se pierde. Así que, cuando candidato contrata vendedores de pirotecnia electoral, es decir, que presentan un espectáculo bonito al momento de hacer la oferta de servicios, pero, cuando ejecutan solo se ve humo, es cuando entenderán que -lo barato sale caro-, pero, para entonces, seguramente ya será tarde para rectificar.
Dos, es innegable que la mayoría de los ciudadanos en buena parte del planeta están desencantados de la política y de los políticos, por lo tanto, no se puede tomar a la política como un juego, pues es algo muy serio, que debe ser realizada con transparencia, compromiso y entrega; ya que es el camino para mejorará la calidad de vida en la sociedad, transformando vidas, ciudades y países.
Tres, no se vale, bajo ningún aspecto, usar temas sensible y delicado contra el ser humano, en especial cuando estos son vulnerables, para tener unos cuantos likes. Eso además de ser irrespetuoso, es revictimizante, irresponsable e inmoral.
La democracia esta herida, y muchos estudios de opinión reflejan el desencanto de los ciudadanos con esta, así que banalizar la política es contribuir con la destrucción de la democracia, y eso no se vale.
